Sociedad. 21 de marzo: día de la seguridad peatonal

Caminar es un acto fundamental que muchos damos por sentado. Desde el momento en que aprendemos a caminar de niños, se convierte en algo natural para nosotros. Sin embargo, navegar el espacio compartido de las calles públicas puede ser un desafío, especialmente considerando que los peatones son los usuarios más vulnerables de nuestro sistema de transporte.

Las estadísticas globales pintan un panorama sombrío, con más de 270 000 peatones perdiendo la vida cada año. Solo en Argentina, se estima que cerca de 1300 peatones perdieron la vida en incidentes relacionados con el tráfico en 2023, lo que representa más del 20% de todas las muertes en el tránsito. En las grandes ciudades, los peatones encabezan las estadísticas de mortalidad por accidentes de tráfico.

Uno de los problemas clave resaltados es la falta de prioridad otorgada a los peatones. En Buenos Aires, por ejemplo, más del 40% de las muertes en el tráfico en la última década fueron de peatones. Es común ver a conductores ignorar la prioridad peatonal, como lo evidencia un estudio realizado por Luchemos por la Vida, que encontró que solo el 12% de los conductores ceden el paso a los peatones. Esta falta de respeto a menudo lleva a los peatones a correr riesgos, como cruzar fuera de las áreas designadas, con solo el 10% haciéndolo correctamente.

La falta de respeto por los peatones es tan generalizada que cuando un conductor cede el paso a los peatones, a menudo se ve como un favor en lugar de una obligación. Esta mentalidad es contraria a las prácticas exitosas de seguridad vial en países donde la prioridad peatonal es primordial.

Para abordar estas preocupantes estadísticas y prevenir muertes evitables de peatones, se deben implementar varias medidas:

Reducir los Límites de Velocidad: Los defensores, incluidas las Naciones Unidas y la Organización Mundial de la Salud, están pidiendo una reducción en los límites de velocidad a 30 km/h en todas las calles a nivel nacional. Esto no solo disminuye las muertes, sino que también contribuye a ciudades más seguras, verdes y habitables.

Aplicar la Prioridad Peatonal: La aplicación estricta y las sanciones para conductores que ignoran la prioridad peatonal y exceden los límites de velocidad son cruciales para reducir muertes evitables.

Mejoras en la Infraestructura: Mejorar la infraestructura es vital. Esto incluye construir veredas donde falten, mejorar las existentes en términos de mantenimiento, amplitud, iluminación y peatonalización de áreas con mucho tránsito peatonal. Además, instalar reductores de velocidad, diseñar infraestructuras para separar vehículos y peatones en áreas densamente pobladas, mantener cruces peatonales, instalar semáforos peatonales en intersecciones y crear senderos seguros para peatones junto a carreteras urbanas son pasos esenciales.

En última instancia, se necesita un esfuerzo colectivo que involucre campañas de concientización y un compromiso de todos los usuarios de la vía para lograr el objetivo de prevenir muertes e lesiones de peatones. Si los conductores se detienen y ceden siempre el paso a los peatones depende de cada uno de nosotros, y es hora de priorizar la seguridad peatonal para un sistema de transporte más seguro e inclusivo.