Continúa el reclamo. Vecinos del Tiro Federal exigen soluciones: "No se puede vivir así"

Orbea contó que el malestar lleva décadas: "Somos 64 vecinos. Firmamos hace tres o cuatro años un documento, se lo presentamos al intendente y lo hicimos circular por todas las defensorías. Pero esta es una lucha que tiene más de 30 años."

Relató además cómo vivió su primera experiencia en el barrio: "Yo compré mi propiedad y nadie me dijo nada. Me dijeron 'va a escuchar unos ruiditos'. Y claro, el primer sábado que me acosté, a las 7 de la mañana había un torneo. Pensé que tiraban con bazucas."

El clima de tensión ha escalado con el paso del tiempo: "Hubo mediaciones, denuncias y hasta escenas de pugilato porque la bronca es mucha. Los vecinos estamos desbordados."

"No es el campo, es un barrio lleno de familias"

Orbea aclaró que no está en contra del deporte, pero sí de su ubicación actual: "A mí me gusta el tiro, me crié en el campo. Pero esto no es el campo: es un barrio lleno de familias y bebés a 10 metros de donde descargan cargadores enteros."

Aseguró que las instalaciones del club están deterioradas: "El Tiro Federal hoy es una tapera. Tienen tres puertas clausuradas, un techo caído y entran por atrás, por un rancho."

Y cuestionó la falta de actualización normativa: "El derecho de preexistencia no corre más si las condiciones cambiaron. Eso ya no es campo: es un barrio residencial."

Ruidos, proyectiles y miedo

Orbea afirmó que la situación afecta la salud y la convivencia: "Los chicos del barrio se asustan, los perros se enloquecen. La salud se deteriora. No se puede vivir así."

Incluso aseguró que se hallaron restos de municiones: "Se han encontrado pedazos de proyectiles en las casas. Sandra Rodríguez presentó una denuncia en Fiscalía por eso."

Un episodio que también involucró a instituciones educativas: "La policía firmó un convenio para tirar los jueves. Era un infierno. El Colegio Sábato estaba enloquecido."

Un conflicto sin resolución

El reclamo ha llegado a distintos ámbitos políticos: "Hemos hablado con todos los concejales. Nos dan la razón, pero no saben qué hacer. Para ellos es irresoluble."

Orbea también criticó la falta de acción estatal: "El municipio le cobra una tasa por ruido a un vecino que tiene un compresor, y enfrente tenés el Tiro tirando con armas de grueso calibre. Es esquizofrenia simple."

Y apuntó contra las comisiones del club: "En 90 años no hicieron nada. Le dieron la espalda a la ciudad."

Asegura que hay vecinos que terminaron mudándose: "Uno encontró un tiro incrustado en una ventana y decidió irse."

Y él mismo analiza vender su casa: "Hice tasar mi casa. Si me hacen una oferta razonable, la vendo. No se puede descansar así."

"¿Quién protege al ciudadano?"

Orbea cuestionó directamente la falta de garantías: "Queremos saber quién protege al ciudadano que paga sus impuestos. ¿Quién nos protege del ruido del Tiro?"

Y dejó un mensaje dirigido al entorno de los tiradores: "Lo único que podemos hacer hoy es avergonzarlos. Que sus familias entiendan que están molestando a más de 200 personas."

Finalmente, mencionó una posible vía de solución: "Escuché que había una oferta concreta para comprar el predio e instalar un establecimiento educativo, y a cambio construir un polígono moderno en una zona apropiada."

A la espera de respuestas

Los vecinos ahora solicitan una reunión urgente con Protección Ciudadana: "Queremos que hagan honor a su nombre."