Sociedad. Fiestas interrumpidas, decenas de infracciones y un policía involucrado

El segundo jefe de la Departamental Tandil de Policía, Andrés Irusta, se refirió a los últimos procedimientos en fiestas privadas y al notable "incremento de reuniones" en Tandil que violan el decreto de prohibición de encuentros sociales en el marco de la pandemia.

El comisario admitió que está "muy preocupado" por este incremento y por la "apatía" que muestran los que participan de estos encuentros. Además, confirmó que en la última fiesta desbaratada dieron con un efectivo de la fuerza bonaerense que estaba allí participando de la juntada.

"Ya se hicieron las actuaciones administrativas", reconoció. "Se tomarán las medidas disciplinarias que la ley policial indica", añadió.

Irusta adelantó que no habrá titubeos a la hora de aplicar la norma. "Si nos encontramos con una situación así, vamos a aplicar la rigurosidad de la ley, tanto en la parte penal como en la policial. Intervendrá Asuntos Internos y se tomarán las medidas que sean necesarias", remarcó.

Lo cierto es que este fin de semana, dieron con otra fiesta privada organizada a menos de 100 metros de la Comisaría Segunda. Irrumpieron en el evento y desalojaron el lugar. Entre tanto hicieron una veintena de infracciones a los participantes e identificaron a los propietarios del lugar.

Días atrás, hicieron un procedimiento similar en una quinta ubicada en las inmediaciones del Boliche de Noli, a pocos metros de la avenida Don Bosco. Pero no son los únicos casos. Estos eventos, que vienen a suplir la oferta de los boliches y los pubs, se multiplican cada fin de semana.

"Fin de semana tras fin de semana vamos notando que crecen estos evento", explicó el comisario.

"La gente tiene un pensamiento contrario al control. Algunos se enojan. Otros, directamente, muestran una total apatía. En términos generales, se podría decir que hay personas que no le encuentran sentido al control".

Irusta cree que el peligro está cerca y podría ser muy dañino. "No entienden que este tipo de reuniones podrían ser el detonante de un desastre. No alcanzan a comprender que a esas fiestas podría concurrir tranquilamente una persona -o más de una- que sea asintomática pero que tenga el virus".

"Puede generar una suerte de bomba atómica respecto a la circulación del virus. Tal vez, todavía no ha ocurrido, pero potencialmente podría ocurrir en cualquier momento", remarcó.

Con respecto a la fiesta de avenida Colón al 1300, los oficiales dieron con el propietario del lugar. "Habrá que ver qué grado de responsabilidad tiene con la organización del evento", indicó. "Nosotros consideramos que hay una responsabilidad importante del propietario porque al menos ha permitido esta reunión. La Justicia deberá determinar si esto es un agravante o lo toma como un infractor más al DNU", concluyó.