La ciudad. El padre de Micaela pide que se investigue el acoso que precedió al suicidio

Ángel Alba, el papá de Micaela, la joven tandilense que se quitó la vida acorralada por la violencia ejercida por su ex pareja, pidió hoy que se investigue si el acoso incidió en la decisión final. "Quiero que la Justicia haga lo que corresponda. Siempre llega tarde y mal; si no hay sangre, no se hace nada. Y yo quiero que se investigue. (La ex pareja de Micaela) parece ser un hombre inteligente y culto pero por detrás de todo eso, no sé... Seguramente hay muchas cosas que yo no sé", indicó Ángel.

Micaela Alba se suicidó el viernes. Horas antes, había subido un posteo en Facebook, detallando la tortura a la que la sometía su ex marido: el acoso sistemático y violento y la ausencia de la Justicia para casos como el suyo. Trabajaba como personal civil en la Fuerza Aérea, tenía 37 años y tres hijos. Su padre, en diálogo con Radio Tandil, reconoció que Micaela sufría de trastornos de personalidad y bipolaridad, pero sobre todo padecía un tremendo terror por todo lo que le había pasado. Cree que el acoso permanente agudizó los problemas emocionales de Micaela.

"Yo sabía de toda la situación porque cuando tuvo la ruptura con su ex pareja, tuvimos que ir a rescatarla a la casa. Había pasado una noche horriblemente violenta, sometida a todo tipo de agresiones", contó. Esas agresiones fueron detalladas en el último posteo de Micaela. La sacaron de allí y fue a vivir a la casa de su abuela.

"A partir de ahí, siempre me manifestó que seguían las amenazas", añadió. "Él le reclamaba cosas muy locas y todo tiempo la agredía a través de mails, whatsapp y en las redes".

Ángel le recomendó acudir a la Comisaría de la Mujer cuando empezaron esas agresiones. Eso fue por el mes de octubre. En el posteo, la víctima también da detalles de este procedimiento que se hizo más de una vez y siempre terminaba en lo mismo: en nada.

"Yo no puedo decir que lo hizo (quitarse la vida) por él, pero sí creo que él ayudó porque las pruebas están. Le había mandado una gillette", sostuvo.

"La policía muchas veces tiene los pies y manos atados. Por otro lado, si yo tomo venganza por mano propia contra quien agrede a una hija mía, el que va en cana soy yo", resumió. "Tengo la misma idea de la Justicia que tiene todo el país: la Justicia llega tarde y mal".

Ángel aseguró que Micaela no contaba todo sobre el calvario al que la sometía su ex pareja porque sentía "vergüenza" pero que internamente era una tortura. "Era una excelente madre y evitó siempre transmitirle sus dolores internos a sus hijos" dijo al mismo tiempo que aseguraba que antes de tomar la decisión de quitarse la vida, había dejado todo ordenado.

"Mi hija tenía problemas de depresión que se agudizaron. Lo que hay que investigar es cuánto insidió todo eso en la decisión que ella tomó", reclamó.