Sin mucha solemnidad se define por los valores que aplica en el día a día. "Yo soy un socialdemócrata", dice. Y pide diálogo nacional, acuerdos con gobernadores, leyes votadas en el Congreso, menos motosierra y más cuidado por lo social. Si Milei lo tuviera enfrente le diría al pediatra que es un "zurdito" más. Y posiblemente el hombre que cursa su último mandato le respondería que es mucho más sencillo y le recitaría el Preámbulo.

El intendente que se define radical de cuna y tumba y extraña el bipartidismo en el país asegura que "bajo ningún punto de vista" se hubiese imaginado este presente.

"Si analizás un discurso de Raúl Alfonsín... Terminar con el Preámbulo, con un llamado a la unidad nacional, a la justicia y a la libertad. Y ahora terminar con '¡Viva la libertad, carajo!'. Creo que es una crisis de dirigentes", argumenta tratando de buscar las palabras justas.

"Lamentablemente, hubo mucha degradación política, mucha corrupción. Entonces la gente se ha sentido molesta, mal, porque le han mentido bastante, en muchas circunstancias. Y además la inflación que te fue carcomiendo la posibilidad de tener futuro", describió.

Otras definiciones de Lunghi en Radio Tandil:

Alberto Fernández: "Y en el último tiempo, también con todo respeto, tuviste un presidente que le tocó un tiempo malo, esto también hay que decirlo, tampoco hay que ser tan depravado. Le tocó la pandemia que nadie sabía cómo manejarla. Nadie sabía y esto es verdad. Yo, como médico, leía en ese momento lo que era la pandemia, pero no sabía cómo manejar el COVID. Pero también tuvo errores, tuvo fiestas, era un hombre que hablaba a la mañana una cosa, a mediodía otra y a la noche otra. Y todo eso fue degradando. Y después la lucha intestina dentro de los partidos políticos. En ese marco aparece una motosierra diciendo 'basta de todo esto' y la gente estaba agotada. La gente estaba agotada y buscó algo distinto. Y esto es lo distinto".

Diálogo: "Yo espero que con el correr de las semanas -porque yo quiero que termine, que en democracia cumpla los cuatro años y que la gente vuelva a decidir- vaya buscando consenso, diálogo, maduración. Estas son las palabras que le tienen que decir sus asesores, que aparentemente no llegan. Vos tenés que tener un equilibrio entre lo político, lo social y lo económico. No podés insultar a todos los políticos y después pedirles que te voten. No podés decirles que son una rata, no podés decirles que se llevaron todo a su casa. Si vos sabés, denúncialo porque es obligación de un funcionario público denunciarlo".

Políticas de Estado: "No podés abrir el mando, con banda presidencial y el bastón, y hablar de espaldas al Congreso, que son legítimamente votados por el pueblo. Me parece que esa es la parte política que tienen que sentarse, tratar 10 puntos, tratando de debatir los puntos -hay algunos que yo pondría y otros que yo sacaría, entre representantes de todos los partidos y llegar así a políticas de Estado, que duren 20 o 25 años, por el bien de nuestros nietos, de nuestros hijos. Esto es fundamental, pero sin extorsión. Nada de si vos no me votás el DNU y no me votás la Ley Omnibus, no sé si llego al 25 de mayo. Esto no porque cada uno tiene legitimidad de origen, cada uno tiene que tener su opinión y hay que llegar a un acuerdo y a un consenso".

Crisis social: "Con respecto a lo social, tenés que hacerlo gradual. Hay un 50% de pobreza y no podés hacer el shock. Fíjate que ya empieza, de a poco, a hacer gradualismo, porque ya pateó el gas, que iba a aumentar este mes, para abril o mayo, porque la gente está totalmente agotada. Y a la economía tenés que hacerla no tan drástica".

Provincia: "Hay que hacer cambios, no digo que no, pero la provincia de Buenos Aires está ahogada porque recibe el 22% de coparticipación y tiene el 40% de la población. Nadie va a aflojar un número, pero tienen que reunirse (los gobernadores), y tienen que estar como cuando se elige el Papa, en una casa, y hasta que no salga humo blanco, no salen de ahí".

Más ley y menos DNU: "Tenemos que cumplir las leyes. Yo no te puedo votar un DNU a libro cerrado. Hay cosas del DNU que están bien, pero otras no. Vamos a tratar punto por punto, lo modificamos y lo mejoramos, después lo votamos, pero no por sí o por no. No estoy de acuerdo, por ejemplo, con desregular el suelo, que vengan de afuera con verde (dólares) y te compren toda la Patagonia; no estoy de acuerdo con desregular las prepagos; tiene que haber una reforma laboral pero entre todos. Empecemos a discutir porque vos no podés cambiar mil treinta artículos de leyes, así, de la noche a la mañana".