En una acción coordinada entre la Comisaría Primera y la Unidad Policial de Prevención Local de Tandil, se llevó a cabo una serie de inspecciones en comercios del rubro de chatarrería, con el objetivo de combatir el robo y comercialización ilegal de cables y materiales ferrosos.
Durante las inspecciones realizadas en la tarde del miércoles 27, se descubrieron graves irregularidades en dos establecimientos de la ciudad.
En primer lugar, en un comercio ubicado en la calle La Rioja al 100, se encontró el libro de registros desactualizado, junto con una enorme cantidad de materiales ferrosos, incluyendo 20 bolsones de cables con un peso superior a las 10 toneladas. Como resultado, se procedió a la clausura del establecimiento y se labró la correspondiente infracción.
Simultáneamente, en otro comercio ubicado en la Ruta Nacional 226, kilómetro 172, se hallaron aproximadamente 1.800 kilos de cables y otros materiales no ferrosos en el interior del predio. Las autoridades tomaron medidas conforme al marco legal vigente, clausurando el establecimiento y realizando las actuaciones correspondientes.
Además, durante esta última inspección, se descubrieron diversas autopartes sin la oblea identificatoria expedida por R.U.D.A.C., incumpliendo así la Ley 25.761 que regula estas actividades. En respuesta, se procedió al secuestro de las piezas de autopartes y se iniciaron acciones legales contra los responsables.
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Datos extraidos de Casas de Hoy